En el vasto mundo del arte, me aventuro en la exploración de nuevos horizontes creativos. Con pinceladas digitales y trazos de tinta, mi mano danza sobre el lienzo del futuro. Dejé atrás a las traviesas ratas, y ahora, ¡oh sorpresa! Son los astutos gatos los que reinan en mi papel.
Con un gato siamés como maestro de ceremonias y su compinche, un gato negro de misterioso pelaje, mis viñetas cobran vida. Juntos, se embarcan en aventuras que desafían la lógica, retan la gravedad y, a veces, simplemente buscan la mejor manera de estirarse bajo el sol.
Espero que estas páginas no solo dibujen sonrisas, sino que también pinten pensamientos en la mente de mis lectores. ¿Acaso no es la risa la mejor medicina, y la reflexión, el alimento del alma?
Así que, queridos amigos, les extiendo la invitación: sumérjanse en este cómic, donde los bigotes son sabios y las colas cuentan historias. Y después, compartan sus impresiones, que serán el mejor regalo para este humilde creador de mundos felinos.
