En un mundo parecido al nuestro, unas entidades rigen la vida y el destino de las personas, las encarnaciones manejan el mundo desde su plano onírico pero no pueden interactuar directamente con los mortales, a menos que recurran a los recipientes: humanos con habilidades especiales propias de sus en...
En un mundo parecido al nuestro, unas entidades rigen la vida y el destino de las personas, las encarnaciones manejan el mundo desde su plano onírico pero no pueden interactuar directamente con los mortales, a menos que recurran a los recipientes: humanos con habilidades especiales propias de sus entidades nacidos para servir de cuerpo material a estos dioses.
Pero el protagonista, Lamium, o como todos le llaman: Lam, es diferente; su pasado trágico (el cual se dará a conocer) y su personalidad libre y retorcida le hacen rechazar sus deberes como recipiente de su entidad, Caos, desatando un conflicto que afectará a los habitantes de una ciudad europea.
La fuente de los poderes de Lam es la propia encarnación del Caos. Entre sus capacidades está la de canalizar y controlar la energía, y la de deshacer las uniones de las partículas que toca, pudiendo por ende destruir cualquier tipo de materia.