¡El Pequeño Demonio Semiacuático! #3
3 years ago
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A pesar de lo juguetones que son, casi nunca se separan del resto de la manada, siempre siguen a sus padres en el camino que recorren, siendo el padre quien los guía y la madre quien los cuida de la cola que forman todos juntos, asegurándose que ninguno se separe, aunque esto puede variar en muchos casos, pues hay padres sobreprotectores con sus hijos, y madres que llegan a guiar a la manada. En el caso uno se separe del grupo, la manada deja de seguir la ruta y esperan y/o buscan por dos o tres días máximo, de no ser encontrada la cría, deben seguir su camino. Cómo es evidente, una vez las crías obtengan suficiente experiencia y definan su personalidad (esto gracias a sus pequeñas antenas las cuáles les permiten percibir emociones y sensaciones), al llegar a la edad adulta no sólo definirán un color para su pelaje (azul o rojo), sino también alcanzarán un inmenso tamaño.